RESUMEN

La presente investigación trata de analizar la violencia en el fútbol español, en particular la violencia generada por el grupo de los hinchas seguidores radicales de un equipo de fútbol. En primer lugar, se hará uso de fuentes de información existentes que hablen sobre el objeto de estudio, para posteriormente analizar la información obtenida a través de la revisión bibliográfica y compararla con la información obtenida por la utilización de diversas técnicas audiovisuales, entre otras, con el fin de comprobar si lo recogido en las fuentes de información sigue a día de hoy dándose en la realidad española.
Se ha comprobado que realmente ha habido una disminución grata a lo largo de la historia, pero ¿acaso cuando hablamos de violencia en el fútbol hablamos solo de violencia física?. A lo largo del trabajo se pretende analizar todo tipo de violencia existente en el fútbol y su origen, pues el hecho de que no se haya podido encontrar información actual y no se haya hablado suficientemente sobre ello, no significa que no tenga una gran relevancia hacia la sociedad. 

INTRODUCCIÓN

Objeto de estudio:

 “El fenómeno social del hooliganismo: la violencia en el fútbol ejercida por los hinchas”.

Objetivos:

·         Analizar la violencia en el fútbol español que se produce en la actualidad a través de los hinchas de un equipo.
o   Conocer el perfil del grupo que asiste y manifiesta una extremada afición al fútbol (los hinchas).
o   Captar qué tipo de violencia predomina en el mundo del fútbol.
o   Averiguar las causas que conllevan a que los hinchas manifiesten determinadas actitudes o hechos violentos en este tipo de deporte.

Tipo de estudio:

Una vez marcados nuestros objetivos, el tipo de estudio en el cual nos vamos a centrar es un tipo de estudio descriptivo pues se pretende describir de manera detalla un hecho social actual como es la violencia en el fútbol, así como también se pretende extraer las tipologías de violencia y finalmente describir al grupo que manifiesta la violencia. Además, tendrá cierto enfoque  explicativo pues nuestro interés se dirige a analizar o  más bien hallar las causas o factores que intervienen en la causación de una acción, actitud o hecho determinado, como es en este caso la violencia en el fútbol.

Justificación de su relevancia social:

El hooliganismo en el fútbol es, a día de hoy un gran problema a nivel mundial, del cual se lleva hablando desde hace décadas. Si es cierto que con el paso del tiempo se han ido tomando cada vez más medidas, incluso en algunos países como por ejemplo Italia se creó una legislación específica para paliar esta problemática.
Pero aun sigue siendo un problema de gran relevancia social, pues podemos encontrar un grupo de personas bastante numeroso que repercute negativamente en la sociedad cuando manifiesta ciertos comportamientos violentos, y en muchos casos las consecuencias también las sufren personas que se quieren mantener al margen de la violencia en el fútbol, pero solo por el hecho de asistir a los partidos de fútbol o por la influencia que pueden transmitir los medios de comunicación les repercute y les hace partícipes. 
Se ha optado por este tema ya que en otros países está a la orden del día la violencia en el fútbol, como es Argentina. Respecto en España, sí que es cierto que han aumentado las medidas, restringiendo el acceso al campo de ciertos objetos, aumentando el personal de seguridad, entre otras, ¿pero estas medidas son suficientes, o para paliar el problema hemos de adentrarnos en primer lugar en  las causas que producen el comportamiento de los aficionados agresivos o violentos?. Como todos sabemos el fútbol es el deporte competitivo más destacado es nuestro país, el cual promueve un gran interés tanto social, político como económico. Día tras día podemos ver y escuchar que se ha producido algún acto violento en este deporte, y por violencia no solo hacemos referencia a agresiones físicas, sino también, insultos, daños materiales, provocación de disputas con los agentes de seguridad, canciones con la finalidad de ofender al equipo contrario, arrojar objetos al campo, etc.  A través de este trabajo se quiere analizar la violencia en el fútbol español,  haciendo hincapié en el  tipo de violencia que predomina en España y cuáles son las causas por las que generan comportamientos violentos.
Es importante para realizar el estudio de investigación, definir el perfil del grupo que genera la violencia en el fútbol para centrarnos posteriormente en este perfil y averiguar las posibles  causas  que les llevan a comportarse de cierto modo no acorde con la normalidad, es decir, presentando actitudes violentas cuando se asiste o simplemente se habla de fútbol.

MARCO TEÓRICO-CONCEPTUAL


Una vez definido el problema a investigar, se requiere aumentar nuestro grado de conocimiento sobre el fenómeno del hooliganismo, concretamente sobre la violencia que se ejerce en el fútbol a través de los hinchas y para ello se realizará una revisión bibliográfica sobre el tema concreto de interés.

HOOLIGANISMO

 Existen numerosas teorías que hablan del origen etimológico del hooliganismo. El más extendido apunta que se debe al apellido Hooligan, que apareció en un informe de la policía de Londres en 1898, referente a un matón llamado Patrick Hooligan. Y se dice que por primera vez aparece el término acuñado en el libro “Entre los vándalos” (Bill Buford, 1992).
Aunque su origen es difuso, Miguel Cancio (2002) menciona que un periodista inventó a este personaje cuyas características sobresalientes eran el alcoholismo y ser pendenciero. Sin embargo, este autor lo atribuye al líder de una banda que asolaba la campiña irlandesa a finales del siglo XIX, cuyo apellido era Hooley por lo que a este grupo se le conocía como la banda de Hooley.
La difusión del término se debe a la aparición del mismo en películas, libros e iconos publicitarios.
En la Real Academia Española podemos encontrar el concepto de Hooligan como hincha británico de comportamiento violento.  Nada más podemos encontrar sobre el término en España porque escasamente se emplea, mencionando sinónimos al respecto como hinchas o vándalos.

VIOLENCIA

En primer lugar se comenzará definiendo el concepto de violencia a grandes rasgos, pues sabemos que la violencia se hace presente en diferentes aspectos de la vida humana, tanto en las relaciones laborales, familiares, personales, como en las actividades deportivas. Respecto a este punto podemos encontrar gran cantidad de bibliografía que habla sobre la violencia, existiendo una amplia gama de autores que tratan el concepto.
Según la filósofa política Hanna Arendt (1988) concluye que la violencia “es la expresión más contundente del poder y que surge de la tradición judeo-cristiana y de su imperativo concepto de ley”. Hace referencia a que la violencia se originaba por los enfrentamientos que se daban entre dos grupos.
Como conclusión extraída sobre el término, la violencia hace referencia al comportamiento deliberado provocando daños físicos o psíquicos, que se ejecuta a través de la fuerza o brusquedad con el fin de imponer u obtener algo por la fuerza causando lesiones, daños psicológicos, e incluso la muerte. Esta fuerza es llevada a cabo contra uno mismo, contra otra persona o contra otro grupo. Implica la existencia de  “un arriba y un abajo que asumen roles complementarios” como señala Corsi.  (Corsi 1994 y Galtung).
Añadir que la violencia es una característica innata de la persona, como decía Mahatma Ghandi, máximo exponente de la NO violencia, reconocía que no existía ninguna persona completamente libre de violencia.
Según Steven Pinker (2003), la violencia y el canibalismo se remontan a más de 800.000 años, habiéndose encontrado los antropólogos, restos fósiles que lo demuestran. Por lo que podemos deducir que la violencia viene de nuestros antepasados y según una Declaración de Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer anunciaba que “la violencia forma parte de un proceso histórico, y no es natural ni nace de un determinismo biológico”. También un Anuncio en 1999 de la Fundación Nacional para la Prevención de la Violencia decía que “la violencia es una conducta aprendida”. Este autor en su libro hace referencia a un artículo de Lyndon Jhonson en 1997, que hablaba sobre cuales eran las causas de la violencia: la pobreza, la discriminación, y el fracaso de nuestro sistema educativo, y no los genes son los causantes de la violencia. Una vez que sabemos las causas de la violencia, se trata de saber eliminarlas, evitando el uso de la violencia para resolver problemas y una educación mejor e intervenir en hogares disfuncionales y en la vida de los niños maltratados ya que se dice que las conductas violentas se aprenden y no son innatas (Betty y Daniel Kevles, 1997).
Antes de pasar al siguiente punto, se ha de hacer un pequeño inciso en las emociones, ya que son de gran importancia por la influencia que pueden ejercer a la hora de ejercitar la violencia. Las emociones en general podemos definirlas como una predisposición a actuar de manera específica ante situaciones y estímulos específicos, y la violencia sería aquella conducta de defensa, ataque, lucha, defensa y huida. Para Bandura (1997), las conductas son aprendidas mediante la observación de un modelo al cual le refuerzan esta clase de conductas, sin embargo, para que ocurran estas conductas se ha de cumplir con las condiciones de oportunidad y capacidad. Refiriéndose con la condición de oportunidad a las circunstancias en el cual se desarrolla la actividad y que facilita la manifestación de alguna conducta violenta. La condición de capacidad se refiere a las habilidades que posea el organismo para desarrollar y evocar tales conductas violentas.

TIPOS DE VIOLENCIA

Existen diversas clasificaciones sobre la tipología de violencia, que a través de la lectura de diferentes libros, manuales y artículos hemos extraído la siguiente tipología acorde con nuestro objeto de estudio (Corsi 1994, Johan Galtung 1995;  José Sanmartín 2004).
·         Violencia física: o directa según Galtung. Es aquella que genera una huella en el cuerpo, unos daños físicos. Incluye una gama amplia de manifestaciones que van desde un pellizco hasta la muerte. Es toda aquella acción agresiva o destructiva contra la naturaleza (ejemplo contaminación de espacios naturales), contra las personas (por ejemplo el asesinato, robo, violación) o contra la colectividad (daños materiales a infraestructuras, guerras).
·         Violencia psicológica: abarca un amplio abanico de expresiones como insultos, ofensas, burlas, actitudes de desprecio, gritos, manipulación, chantaje, control, etc.
·         Violencia cultural: para el logro de la aprobación de posturas fanáticas en lo religioso, ideológico, económico, en la relaciones de género. Se trata de amplísimo entramado de valores que asumimos desde pequeños y que luego se refuerzan con las normas legales de la sociedad para inculcarnos cierta cultura opresiva y prepara a la sociedad para tomar una forma pasiva en las estructuras injustas e insolidarias. Galtung define este tipo de violencia como “una violencia que se expresa desde infinidad de medios y que cumple la función de legitimar, así como de inhibir y reprimir las respuestas de quienes la sufren, y ofrece justificaciones para que los seres humanos, a diferencia del resto de las especies, se destruya mutuamente y sean recompensados incluso por hacerlo”.

CAUSAS Y FACTORES DE LA VIOLENCIA

Para conocer el por qué se lleva a cabo un comportamiento deliberado provocando una serie de daños, es necesario conocer las causas y factores que influyen en las personas y les lleva a realizar actos violentos.
·         Factores sociodemográficos:
o   Edad: guarda una estrecha relación con la violencia. Las tasas más altas de agresión y victimización se dan en los individuos de edad comprendidas entre 16-25 años, según el Seminario Internacional sobre la Prevención de la Violencia en el Deporte de 1989, y tres años después una Encuesta policial sigue situando la edad media de estos jóvenes en algo más de 20 años. Este punto se argumenta por los cambios hormonales producidos en cada edad es lo que explica la violencia interpersonal. Igualmente, tras la visualización de ambos filmes el perfil de los hooligans (hinchas radicales) está compuesto por un grupo de varones con una edad inferior a los 30 años.
o   Sexo: los varones tienen más probabilidad de generar violencia que las mujeres. Diferentes teorías atribuyen que esto se debe a que esta clara diferencia entre los sexos se tiende a atribuir a las hormonas  o a la genética (Berkowitz, 1993). En muchas culturas el papel del hombre se asocia con la violencia, también verbal (Maccoby y Jacklin, 1974). La diferencia sexual en la violencia es en parte situacional, mientras los actos de violencia contra desconocidos o en lugares públicos son perpetrados por varones en la mayoría de los casos, la violencia en entorno íntimo se da en proporciones muy similares tanto en el varón como en la mujer.
o   Raza: se produce un  sentimiento contra las personas de distinta raza, o contra aquellas personas cuyos rasgos físicos no coinciden plenamente con ellos. Se dan brotes racistas y xenófobos emergidos en nuestras sociedades occidentales a través del fútbol. Existen numerosos acontecimientos que vinculan a ciertos miembros de hinchadas con agresiones racistas (Javier Durán González, 1996).
·         Los factores socioeconómicos: como pueden ser el desempleo y la distancia que en ocasiones existe entre las necesidades económicas y los recursos disponibles para satisfacerlas. La situación económica y las desigualdades son dos factores sociales muy importantes de la violencia. Es un hecho demostrado que las tasas de comportamiento violento son más altas entre aquellos que tienen ingresos más bajos (Blau y Blau, 1982; Williams, 1984).
Las multitudes que asisten a eventos deportivos tienen una composición social heterogénea, ahora vamos a hacer referencia a los factores sociales que contribuyen a la violencia:
o   Lazos identificatorios: cuanto más se identificaban los hinchas con su equipo, mayor era la probabilidad de que se implicaran en un disturbio. Una investigación de Wann, Haynes, McLean y Pulle en prensa, puso de manifiesto hasta qué punto estaban dispuestos a emplear violencia los hinchas radicales para apoyar a su equipo, y un amplio grupo estaban dispuestos a dar empujones, a romperle un miembro del cuerpo, incluso una pequeña parte estaba dispuesta a cometer un asesinato.
o   Camaradería: las personas que asisten en grupo al fútbol, es decir a medida que el tamaño del grupo aumenta, aumenta también la probabilidad de que se de violencia, están más dispuestos de participar en altercados a diferencias de aquellas personas que acuden individualmente (Rusell y Arms, 1998).
·         Factores culturales: Wolfgang y Ferracuti (1967) proponen una teoría según la cual los valores y normas sociales proporcionan sentido y dirección a los actos violentos, y por lo tanto, favorecen la aparición de la violencia en ciertas situaciones relacionadas con esas normas y valores.
Además, en el filme “Footboll Factory”, hace referencia a la cultura machista, donde el varón es el que asiste al fútbol y expresa la violencia, no dando lugar a la participación de la mujer en este tipo de encuentros, pues se considera que el hombre muestra la agresividad como una forma de demostrar su fuerza y poder.
·         Proceso de Socialización: los jóvenes tienden a repetir en sus pandillas de amigos las mismas pautas de comportamiento y sociabilidad que reciben en sus ambientes familiares. Resulta difícil que un joven que haya crecido en un entorno familiar de estabilidad emocional y donde haya recibido el cariño y atención adecuada busque núcleos juveniles donde los valores que predominen sea la violencia. Por el contrario, si puede ser más fácil que los jóvenes que hayan crecido en ambientes problemáticos en los que haya ausencia de cariño, exista violencia y se le haya tratado de manera cruel, se sentirán más cómodos con jóvenes de características similares que les facilite su relación con el entorno de la forma en que saben hacerlo (Javier Durán González, 1996). Por lo tanto, la estrecha relación existente entre personalidades violentas y una infancia caracterizada por malas experiencias está demostrada según Díaz-Aguado (1995). Vivir en un entorno violento aumenta el riesgo de ejercer este tipo de conductas o de convertirse en víctima, sobre todo cuando la exposición cotidiana se produce en momentos de especial vulnerabilidad como es en la infancia o la adolescencia. Según señala Luis Rojas Marcos (1994), “las semillas de talante violento y antisocial se siembran y se cultivan durante los primeros años de vida, se desarrollan en la infancia y suelen comenzar a dar sus frutos dañinos a principio de la adolescencia”.
·         Factores situacionales: el contexto y las condiciones en que la gente asiste a un evento deportivo, así como las características competitivas de los equipos enfrentados, pueden influir en sus acciones. Roadburg (1980) propuso un listado de factores que supuestamente favorecen la aparición de la violencia en el fútbol como es la competitividad y el hecho de contemplar la violencia:
o   Competitividad: la importancia del partido, el resultado y la hora del día. Además cuando los equipos son rivales tradicionales aumenta la violencia. El hecho de estar presentes los simpatizantes del equipo contrario.
o   Contemplar la violencia: cuando uno es testigo de violencia se activan los impulsos hostiles acumulados. Es demostrado según estudios (Arms, Russell y Sandilands, 1979; Russell, 1993), que cuando ocurre un cambio en el grado de agresividad del observador, aumenta la violencia por parte de este. Por lo que si los aficionados perciben violencia por los jugadores, el nivel de violencia se puede ver también alterado entre los hinchas.
o   Consumo de drogas y alcohol: muestran fortaleza soportando las alteraciones en la conciencia que producen estas sustancias. Además por el consumo de estas sustancias, están excitados y descontrolados, lo que les permite saltar y cantar durante el partido y son más propensos a generar violencia. (Ensayo “Violencia en el Deporte”, disponible en: http://www.buenastareas.com/ensayos.).
·         Factores ambientales:
o   La temperatura: hay estudios que demuestran que hay una relación entre la temperatura y la violencia. El autor Dewar (1979) observó que la violencia tenía lugar principalmente durante las épocas de calor, aunque reconoció que le hecho podría estar relacionado con otros factores. Otro estudio (Reifman, Larrick y Fein 1991), demostró que los espectadores eran más hostiles a medida que la temperatura superaba los 38º.
o   La oscuridad: Dewar (1979) halló que el 69% de las peleas entre espectadores ocurría por la noche, explicando que la oscuridad crea un estado de desindividualización en el que las personas son menos conscientes de sí mismas y, en consecuencia, se preocupan menos de cómo los demás evalúan sus acciones (Mann, Newton e Innes, 1982).
o   El ruido: según Geen y McCown (1984), el ruido puede aumenta lar probabilidad de que se produzcan agresiones. Resultados de diversos estudios sugieren que los efectos del ruido son más pronunciados cuando el individuo también está expuesto a estímulos violentos, por lo que se concreta que el ruido que se manifiesta a intervalos irregulares o sobre espectadores enfadados tiene un efecto mayor (Geen y O´Neal, 1969).
·         Cogniciones Sociales: incluyen varias líneas de investigación relevantes para la comprensión de las condiciones que favorecen la violencia:
o   Priming (activación asociativa): como todos sabemos crear un clima favorable disminuye la tensión que se puede generar entre las personas. Por lo tanto, la utilización de hipérboles mediáticas que destacan en un partido con metáforas violentas, pueden sugerir el conflicto inconscientemente mediante la activación asociativa de esquemas violentos. Baron y Byrne (1997), definen como esquemas a los  “cuadros mentales que contienen información relevante para situaciones o eventos específicos que, una vez establecidos, nos ayudan a interpretar estas situaciones y lo que está pasando en ellas”. Y Wann y Branscombe (1990), señalan que cuando un esquema violento es activo, el resultado puede ser que uno perciba que los demás son una amenaza. Lo que se quiere decir con esto, es que ante un entorno amenazador, algunos aficionados pueden adoptar una actitud de confrontación, generando violencia. Viendo el filme se puede observar como un grupo provoca a otro para generar violencia, como una manera de demostrar que el grupo que gane la pelea es mayor seguidor de su equipo.
o   Atribuciones: cuando pierde un equipo de fútbol se  tiende hacer atribuciones externas para explicar la derrota como un mal arbitraje, mala suerte, juego sucio de los contrincantes, etc. Esta combinación de atribuciones, que Mann (1989) denomina “reacciones de mal perdedor”, es un factor que contribuye a generar violencia. Al encontrarse en situaciones incontrolables, como perdida de un partido, se cree no tener más opción que actuar buscando una atribución.
o   Sesgo hostil en las atribuciones: tanto individuos que forman una multitud, como aquellos que asisten de forma independiente, perciben diferentes intenciones. Algunas personas siempre tienen un sesgo hostil en las atribuciones que hacen, es decir, tienen una tendencia a percibir malevolencia o malicia e las acciones de los demás, incluso cuando no las hay (Baron y Richardson, 1994). Esa percepción sesgada queda patente cuando las situaciones sociales son ambiguas. Estas personas tienen a tener reacciones fuertes, incluso ante provocaciones leves. La relevancia de este fenómeno cognitivo en los disturbios radica en que la mera percepción de intenciones hostiles puede provocar violencia (Greenwell y Dengerink 1973).
·         Los medios de comunicación: son acusados de recurrir a la violencia para provocar el interés del espectador. A veces los medios de comunicación no es sólo un mero informador sino que buscan sensacionalismo. Utilizan la violencia como medio comercial y publicitario para sacar rendimientos incitando al consumo y la asimilación de hecho tendiendo a seleccionar los aquellos más llamativos y violentos (José San Martín Esplugues, 2004). El efecto mimético había sido esencia para la introducción en nuestro país de actitudes y comportamiento violentos y sobre todo de la posterior generalización del colectivo hincha en el país (Javier Durán González, 1996).

FÚTBOL

            El fútbol es uno de los deportes más característicos de España, por ello, hemos introducido en nuestro objeto de estudio este tipo de deporte puesto que mueve a una gran masa social. A continuación, se va a hacer una introducción histórica del fútbol en España.
El fútbol fue introducido en España a finales del siglo XIX por razones comerciales, industriales y de tipo pedagógico. Y en apenas dos décadas es consagrado en España como un espectáculo de masas. En 1909 nace la Federación Española de Fútbol, encargada de organizar distintas competiciones regionales hasta el nacimiento del Campeonato de la Liga en 1928. Es en 1926 cuando se admite su profesionalismo  y aficionados, jugadores y sociedades van aumentando crecientemente, convirtiéndose el fútbol en el deporte en tema de polémica nacional, con tres bloques futbolísticos en conflicto: vascos, catalanes y madrileños. Además se empiezan ya a intensificar las rivalidades locales y regionales.  Los equipos de fútbol alcanzan dimensiones que exceden el ámbito deportivo, y un conjunto puede convertirse en el más representativo de la región, expresando un sentimiento, como por el ejemplo la frase utilizada por el F.C. Barcelona “algo más que un club”,  frase acuñada en los años setenta reflejando la ideología actual en los fondos de los estadios españoles.
En 1899 nace el F.C.  Barcelona, fundado por el suizo Hans Gamper, equipo formado exclusivamente de jugadores extranjeros, como reacción ante esa invasión foránea, en la ciudad de se funda el  Català, equipo que terminaría uniéndose al Español, que había nacido también como club autóctono. Sin embargo, durante la crisis de 1908 el Barcelona se orienta hacia sectores políticamente activos del “catalanismo, por lo que el club Español se separa, siendo el eterno rival del Barcelona y pasó a sustituirse en los años cincuenta en el Real Madrid. Es importante tener en cuenta esta información para saber el origen de las fuertes rivalidades de los equipos de fútbol.
Durante la guerra civil de 1936, la actividad futbolística cesa, reanudándose al final de esta, debido a la gran demanda popular. Sobre los años cuarenta y cincuenta, el fútbol se convierte en una especie de desahogo nacional. Es cuando comienza el surgimiento de las peñas, la unión de aficionados que siguen a su equipo.
A mediados de siglo, la rivalidad futbolística logra traspasar el ámbito local y se polariza: el Barcelona-Real Madrid se convierte en un “clásico”. Durante el Franquismo (1939-1975), el Barcelona se le da un amplio significado simbólico, por lo que se ha comentado antes “El Barcelona es más que un club”. Pero el Real Madrid pasa a un primer plano, según algunos estudios como el de Shaw (1987), dice que “el Real Madrid es un club derechista y monárquico, y que, tras la contienda, los socios y aficionados madridistas eran favorables a Franco”, calificándose al equipo del Real Madrid como el  “equipo del régimen”, apoyo gubernamental que dicen que le sirvió al club para dominar la Federación. Podemos concretar que comienzan dos equipos de fútbol y que equiparándose a la historia política del país se van centrando los dos equipos rivales que predominan, en dos ideologías distintas y por tanto una división del país: por un lado encarna simbólicamente el poder central para el Real Madrid y la sociedad catalana para el Barcelona. Concluimos que ya desde el comienzo de los grandes equipos de fútbol en España comienza no solo la rivalidad en el deporte, sino también desde un primer momento la rivalidad política e ideológica. (Shaw, D. 1987. “Fútbol y Franquismo”, Madrid: Alianza).
Tras el final del Franquismo (1975), continúa la polarización deportivo-social entre ambos equipos, aumentando la expresión del sentimiento “nacionalista”: los colores de un equipo se intercambian con los de una bandera autonómica en los Fondos de varios estadios, hablando un mismo lenguaje, y no sólo utilizan estos símbolos, para mostrar su sentimiento, también la violencia.
A mediados de los ochenta aparece la figura de los hinchas, cuyo protagonismo resalta por la violencia en  el fútbol, por lo que se comienzan a tomar medidas a lo largo de la historia para paliar ese comportamiento violento. Pero hablaremos más detalladamente de este grupo, en el siguiente punto (Santos C., 1991; Adán Revilla, 1997).

LOS HINCHAS

            El mundo del fútbol lo componen un gran número de personas y grupos. Aunque en este caso se hará hincapié en uno de los grupos más significativos que lo forman, como son los hinchas radicales. En primer lugar se hablará sobre el origen del término, de su significado, una breve introducción histórica y finalmente, las características que conforman el perfil de los hinchas, según diversos estudios.
El término “hinchas” se emplea como sinónimo de aficionado, forofo, seguidor de un equipo de fútbol. Es un término uruguayo aplicado al fútbol con el que se conocía al encargado de “hinchar” el balón del nacional Montevideo, equipo al que alentaba con sus gritos durante el partido. El término pasó de Uruguay a Argentina (aunque a los hinchas radicales  de allí se les llama “barras bravas”) y luego a España. En Inglaterra y Alemania el término utilizado es “hooligans”, en Bélgica y Holanda “siders” y en Italia, Francia y Yugoslavia “ultras”. En Latinoamérica el término utilizado es “bravas”.
En España se utilizan tanto ultras como hinchas no dándose una gran diferencia aunque si que la exista. Nosotros a lo largo del trabajo solo vamos hacer referencia a los hinchas, puesto que según el Manual de dónde vamos a extraer la información de este apartado dice que los grupos ultras tras la transformación sufrida debido a las diferentes medidas tomadas para paliar la violencia, se utiliza con más frecuencia en España el término de hinchas.  Vamos a establecer la diferencia de los dos términos, ultras es el nombre que reciben los grupos más radicales que apoyan a un equipo de fútbol, mientras que hinchas es para referirse a un grupo de aficionados, fanáticos, simpatizantes de un determinado deporte (http://es.wikipedia.org/wiki).
Es el grupo que se encarga de animar a su equipo favorito a través de cantos, gritos, carteles, pancartas y porras, o bien ejerciendo presión social en el cuerpo arbitral para que marque alguna falta o insultando o abucheando a los jugadores del equipo contrario durante la posesión del balón. Se refiere a aquellos individuos partidarios y entusiastas, especialmente de algún equipo de fútbol, también puede hacer referencia a otros ámbitos como la música y la política, aunque mayoritariamente se utiliza para el mundo del fútbol.
El final de la Dictadura (1975) trae consigo la consolidación de los grupos de aficionados o peñas y es en el año 1982 con el Mundial español, cuando aparecen los grupos ultras (imitación de los italianos) que en España son los hinchas radicales, los grupos visibles en los fondos de los estadios y protagonistas de un comportamiento violento hasta entonces desconocido. Es a mediados de los ochenta, cuando estos grupos se multiplican, retroalimentando e imitando el comportamiento de los hinchas. El nacimiento del movimiento en España coincide cuando el PSOE gana las elecciones, con esto se quiere decir que algunos hinchas viven cierto compromiso político, manifestándose activamente por ejemplo contra la OTAN, participando en el movimiento estudiantil, etc., pero sobre todo lo más destacado era su relación directa con determinados movimientos políticos, como es el caso de el Frente Atlético toma el nombre de la organización falangista Frente de Juventudes. En los primeros años de los ochenta, los hinchas se inclinan a ambos lados políticos, adoptando imágenes emblemáticas, evocando ciertas consignas, y exhibiendo lemas y símbolos en pancartas, banderas y otro tipo de material. El uso de esto ha sido siempre de tipo instrumental, es decir, lo utilizan para provocar el rechazo a los demás, incidir en las diferencias con el resto de la afición y la sociedad en general, y mostrar su repulsa por el “sistema”, por lo establecido. Las banderas (españolas, célticas, esvásticas, autonómicas, estrellas rojas, cubanas con el rostro del Che Guevara, etc.) ondeadas por el grupo encarnan simbólicamente un sentimiento de independencia política, un reivindicación del derecho a la autodeterminación, mientras los contrarios se manifiestan utilizando el mismo lenguaje (Santos C., 1991).
Gran parte de la información obtenida ha sido a través de un estudio de Adán (1997), realizando una encuesta en ese mismo año a los miembros del Frente Atlético  y  en estas los hinchas reconocieron el problema originado por la pseudopolitización de los grupos. En el caso de Frente Atlético, los encuestados entre 18-22 años consideran preferible desterrar la “política” del grupo antes que los actos violentos.
A pesar de que los actos vandálicos incrementaran, los medios de comunicación tuvieron gran protagonismo, pues daban un tratamiento y un sensacionalismo desproporcionado sobre el grupo que ocupada la grada de fondo en el fútbol, de modo que según Castro Moral (1986) “intoxicó el ambiente”.
Adán (1997) habla de que es entonces en 1988, cuando el Senado, ante la alarma que daban los medios de comunicación por el fenómeno y también por el relativo incremento de violencia, nombró una Comisión que estudiara las raíces de la violencia en los acontecimientos deportivos. Por lo tanto se originó una incipiente jurisprudencia y se intensificaron las medidas policiales en los estadios, se prohibió la pirotecnia, e incluso algunos estadios rompieron relación con los hinchas más radicales y les cambiaron la ubicación, tomando éstos conciencia de la nueva situación que se estaba dando, al concebir tal prohibicionismo.
En los años noventa, el despliegue jurídico-policial obligó a los grupos a transformarse o incluso desaparecer, pasando de hinchas radicales a peñas legalizadas y jerarquizadas con un reparto de funciones. Además en este periodo se regula la entrada por medio de un carnet. Pero también destacar en esta época que la expresión de sentimiento independentista no se expresa ya solo por rivalidades según diferente equipo, sino que dentro de un mismo grupo de hinchas, se empiezan a originar subgrupos debido a la homogeneidad ideológica  y la pérdida del espíritu que animó a los primeros hinchas, dominando la pseudopolítica. En 1995 un hincha de Ultras Violentas, Valladolid, dice así “los grupos de gentes de ideologías distintas dentro de la hinchada se dejan pudrir por el gran cáncer del fútbol español: la política” (Santos C., 1991; Adán Revilla, 1997).
Para concluir con este punto resulta necesario hablar sobre las características que conforman el perfil del hincha radical:
·         Características comportamentales: el joven ultra encuentra en el grupo una identidad ya predispuesta con un conjunto de normas, valores, sensaciones, creencias, razones y modelos de acción. A través de un proceso de culturación y asimilación del rol hincha, el integrante del grupo asume las imágenes y reglas de conducta a través de las cuales puede ser confirmado por los otros y aprobado por el grupo entero. Pero el comportamiento de los hinchas se ha ido modificando con el tiempo, transformación debida tanto al autocontrol de los hinchas como a las medidas disciplinarias adoptadas por la Administración, y de cuyo cumplimiento se encarga la Policía. La policía ha jugado un papel fundamental en la difusión de hinchas radicales. La efectividad de los controles y escoltas policiales tanto en el estadio como en desplazamientos (Adán Revilla, 1997).
·         Características sociodemográficas: respecto la edad media del grupo de los hinchas, es de 22 años, según un estudio referido al Frente Atlético (Adán 1997). Es bien sabido que los jóvenes participan en sucesos de esta naturaleza mucho más habitualmente que personas adultas. Resulta difícil encontrar un solo estudio sobre este grupo en que no se destaque la juventud como uno de los rasgos más característicos. En 1989 la edad de los integrantes de estos grupos oscilaba entre los 16 y 25 años (1989 Seminario Internacional sobre la Prevención de la Violencia en el Deporte).  Según un trabajo de investigación  los Boixos Nois, hinchas del F.C. Barcelona, por lo general comprenden una edad entre 18 y 23 años (trabajo de investigación de Varun Gehani “¿Por qué son violentos los fanáticos del fútbol?”, 2007). Y añadir que un estudio de investigación realizado en Eurocopa (Kerr, 1994), caracterizan a los hinchas como varones jóvenes y solteros, con un empleo semiespecializado, de bajo nivel educativo, y en cierto sentido, inadaptados socialmente.

LA VIOLENCIA EN EL FÚTBOL ESPAÑOL

Una vez que se ha hecho referencia a la teoría sobre la violencia, incluido los tipos y causas que la genera, además de una pequeña introducción histórica sobre el fútbol y sobre el colectivo de los hinchas. Se cree necesario aunar todos los conceptos vistos para adentrarnos al objeto de estudio.
Los artículos y estudios que se han escrito sobre la violencia en el fútbol simplemente describen los actos de violencia que han ocurrido, y sobre todo la mayoría de estos estudios centrándose en la violencia en el fútbol internacional. Si que existen ciertos artículos que analizan incidentes de violencia que han ocurrido en el fútbol español y que podemos ver en la página web del conocido periódico español El País que tiene una amplia colección sobre tales artículos.
Como hemos dicho existen algunos estudios que aunque son escasos en España, podemos encontrar algunos tras la dictadura (1975 y 1985) de Adán (1997), que analiza los datos de prensa deportiva. Estos concluyen que de los seis mil episodios violentos registrados durante ese periodo, un 90% se produjo en el marco de encuentros de fútbol. De estos, la mayor parte de los incidentes se califican como agresión entre jugadores un 35% y lanzamiento de objetos al terreno de juego un 30%. Las agresiones entre espectadores aumenta en 1982 debido a su aparición de los primeros grupos hinchas, incluso se produjeron incidentes mortales víctimas del uso de cohetes y bengalas (Castro Moral, 1986).
El movimiento hincha en España registra pocos incidentes con víctimas, resultando irrisoria comparado con otros países como Argentina que actualmente presente 183 muertes. (Mostrado en el artículo que podemos ver en el siguiente enlace: http://playfutbol.infobae.com/notas/570764-Son-183-los-muertos-por-la-violencia-en-el-futbol). Un análisis comparativo de la Comisión Antiviolencia revela que entre 1993-1996 se ha doblado la presencia de hinchas, mientras que disminuyen los partidos de “alto riesgo”. Un 30% de las más de dos mil propuestas de sanción durante el periodo fueron causadas por la alteración del orden público, y cifras que rondan el 10% se deben a la violencia entre aficionados, los delitos relacionados con el alcohol, el lanzamiento de objetos y la incautación de armas y otros objetos contundentes. Se pone un significativo aumento de las agresiones, amenazas e insultos a la Policía, un 70%.
Por lo que se refiere al grupo que ejerce la violencia en el fútbol, se alude una mayor participación en actos de violencia a la irrupción en los fondos españoles, donde se encuentran situados los hinchas del equipo. Grupo que ya hemos hecho gran referencia sobre su participación en el mundo del fútbol. Se dice que la violencia en el fútbol español se da de forma primaria a través de los hinchas, pero también existen otros grupos que influyen de forma secundaria, simbólica y mediática como son: los medios de comunicación (según el sociólogo y economista Miguel Cancio  2002 siendo España uno de los países del mundo que destina más tiempo en prensa, radio y televisión, al fútbol), los presidentes, directivos, entrenadores, equipos técnicos, árbitros, jugadores, federaciones, etc.
Anteriormente, se ha hablado de diferentes tipos de violencia a grandes rasgos. En el mundo de fútbol español a lo largo de la historia se ha dado una tipología descrita como en el apartado anterior, pero hemos de especificar más detalladamente  el tipo de violencia practicada en el fútbol. De los tres tipos de violencia  que hemos hecho referencia, aparece incorporada la violencia verbal dentro de la violencia psicológica, pero en lo que atañe al mundo del fútbol la violencia verbal va aparte de la violencia psicológica, siendo la violencia verbal un tipo de violencia gratuita, es decir como una forma de provocar violencia. Según Dunning (1992) los hinchas adoptan dos tipos de violencia:
·         Afectiva: que se toma como un fin en sí misma, emocionalmente satisfactoria y agradable.
·         Racional: racionalmente preferida como medio para asegurar el logro del fin determinado, como es mostrar la superioridad sobre grupo rival, arrebatando distinto símbolos (pancartas, bufandas, etc.).
En los derbys o enfrentamientos de grandes equipos de fútbol, se dice que no es necesaria la provocación, porque basta el hecho de que haya intentado invadir el territorio del enemigo para que se cometa cierta violencia.
El fútbol sirve para expresar identificación, dar sentido a su vida y mejorar su estima hasta el punto de convertirse en algo propio por lo que luchar y de sustituir a la pareja o a la familia. Alivia las frustraciones y acoge a todo el mundo organizando a sus aficionados en simpatizantes o hinchas según el grado de sentimientos, emociones o formas de reaccionar con que viven el fútbol. Se trata de favorecer la autoestima y la amenaza-insulto ante el miedo a perder identidad. En este punto es donde se dice que entra en juego la seducción de las palabras y los posibles riesgos de difuminar las fronteras entre pasión y violencia.
En la actualidad predomina en el fútbol las formas violentas del lenguaje, interviniendo varios factores:
·         El estadio como el lugar de violencia ritual donde la brutalidad, el descaro y la ordinariez son expresiones primarias que forman parte de la fiesta.
·         El fútbol crea un nuevo marco donde el periodista ya no es sólo un mero informador sino que tiene que desarrollar funciones de educador, orientador de la información y mediador comercial. Se encuentra en medio de la pasión de los espectadores, la violencia propia del juego, el frenesí comercial y publicitario que intenta sacar rendimientos incitando al consumo y la asimilación de varios hechos que ocurren a la vez teniendo que seleccionar el más llamativo.
·         Existe una tendencia generalizada a buscar expresiones que generen emociones, sensaciones e impresiones del espectáculo deportivo. Lo técnico sólo es comprensible por quienes han participado en el fútbol, mientras que las palabras con lenguajes figurados comentando a que se parece llegan a más público.
·         Con más frecuencia cuando se habla de dirigentes, surgen agresiones verbales gratuitas, ofensas innecesarias y difamaciones.
·         Se buscan declaraciones de impacto, como descalificaciones, insultos o provocaciones. Unas veces para hacer presión y conseguir un mejor resultado y en otras acaparar la atención del público y conseguir una mayor animación de su parte.
·         Hay excesos de interpretaciones de los hechos y valoraciones de jugadas que suceden a gran velocidad y difícilmente pueden resultar en ciertas ocasiones captadas como realmente suceden.
·         Las pasiones locales por el triunfo de su equipo por haber ganado y no descender categoría.
·         Y finalmente, el lenguaje belicista de fútbol. Afortunadamente, cada vez se da menos. Esta práctica de lenguaje se debe a que la difusión del deporte has mediados de siglo correspondió al mundo militar, que al no tener terminología en las diferentes lenguas  contó el futbol con el que tenía más a mano: tiro, obuses, artillero, cañonazos, etc. Aunque este lenguaje ayudó a formar un estado de ánimo tendente a la disciplina, al trabajo en equipo, a la entrega en la conquista de un fin.
La mezcla de estos factores y la exacerbación de la pasión deportiva, el frenesí comercial y los sentimientos y valores asociados es lo que puede hacer que los espectadores difuminen esa frontera entre la pasión y la violencia. El salto de la violencia en el campo y los despachos a las gradas, la desinhibición de la gente al actuar en grupo, el presentar las victorias como un elogio del descontrol y las derrotas como un conflicto hace que la violencia anide entre los hinchas con enfrentamiento entre sí y en algunos casos con otros estamentos del fútbol. Cuando la violencia y la pasión actúan a la vez, algunas personas reaccionan en masa y se llega a situaciones de guerra pasional donde todo vale: agresiones a personas y destrozos en los estadios; salvajismo, asesinatos, disturbios y acciones contra los intereses de los jugadores. (Jesús Rodríguez Castañón 2002).
El fenómeno de la violencia en el fútbol para N. Elias y E. Dunnig (1992), es mejor comprendido desde que se observa no solo como resultado de la frustración social sino también como una manifestación  entre otras, de la “búsqueda de excitación en una sociedad nada excitante”. 

FORMULACIÓN DE HIPÓTESIS

   Tras la deducción lógica de los estudios y teorías tratados en la revisión bibliográfica, se ha concluido la siguiente hipótesis, a través de la cual se pretende dar explicación a los factores que inciden en la violencia, dando por hecho que el tipo de violencia que prevalece es la verbal y ciñéndonos a un tipo determinado de perfil del hincha. Con la utilización de diferentes técnicas e instrumentos se pretenderá averiguar si la hipótesis obtenida la podemos verificar o por el contrario rechazar.

“Actualmente en el fútbol español predomina la violencia verbal cuyas principales causas son las cogniciones sociales, el proceso de socialización, los medios de comunicación, los factores situacionales, ambientales, sociodemográficos, socioeconómicos y culturales. Siendo el perfil del hincha, que ejerce ese tipo de violencia, el varón  de 14-25 años”.

OPERACIONALIZACIÓN DE CONCEPTOS

   Una vez formulada la hipótesis, el siguiente paso es su operacionalización, pasando a extraer todas las variables de la hipótesis para definir cada una de ellas y así comprender mejor la investigación.
·         Tipo de violencia verbal: se ha hablado de tres tipos de violencia (física, psicológica y cultural), y como se ha deducido, la que predomina actualmente en España es la verbal. Se trata de una violencia gratuita como forma de provocar al rival, como señala Dunning, los hinchas adoptan este tipo de violencia como medio para asegurar el logro del fin determinado, como es mostrar la superioridad sobre grupo rival, arrebatando distintos símbolos (pancartas, bufandas, banderas, etc.). Descartamos la violencia física pues apenas se aprecia en los campos españoles por las medidas que se han tomado a lo largo de todo este tiempo, también descartamos la violencia psicológica, pues como se ha dicho,  no podemos introducir la violencia verbal dentro de la psicológica en este tema, pues no se trata de un daño directamente psicológico, sino que este tipo de violencia verbal, es una forma de provocar violencia.
·         Causas principales de este tipo de violencia: existen una multitud de factores que influyen a que lleven a cabo determinado comportamiento violento, hablamos tanto de factores sociodemográficos, socioeconómicos, culturales, ambientales, situacionales, cogniciones sociales, así como también el proceso de socialización (todos ellos descritos en el correspondiente apartado de la revisión bibliográfica). Una razón significativa por la que creemos que se da ese tipo de violencia en el fútbol es el alto nivel de tensión que causa las rivalidades entre equipos, rivalidades por las diferencias culturales, por las regiones de ambos equipo y diferencias políticas. Equipos como el FC. Barcelona todavía simboliza los sentimientos nacionalistas que tienen frente al resto de España. Además se valorarán otros puntos como las condiciones climáticas, el ruido, si consumen drogas y alcohol, la edad, sexo, las conductas racistas, etc.
·         Perfil del hincha: es aquél varón con una edad comprendida entre 14-25 años, se ha considera que ese intervalo de edad es el que prevalece dentro del colectivo. Esta es la muestra seleccionada en la que se hará referencia a lo largo del proceso. Tras lo contemplado en la revisión bibliográfica, el estadio suele estar constituido de un gran número de hinchas, especialmente, jóvenes varones. 

DISEÑO METODOLÓGICO



   Lo que se pretende con la investigación es analizar la violencia en el fútbol ejercida por lo hinchas en España a día de hoy. Para ello se ha de conocer en primer lugar el perfil del grupo que practica la violencia (el perfil de los hinchas), para ello se pasarán unos cuestionarios en los cuales podremos captar la información imprescindible de la muestra seleccionada, también las imágenes nos pueden dar cierta información del perfil del grupo (vestimenta, complementos que lleva el grupo como: manera de identificación y diferenciación respecto a los demás aficionados al fútbol, sexo, etc.). Por otro lado, se pretende averiguar cuál es el tipo de violencia que predomina en el campo del fútbol, para ello se grabarán distintos videos captando en el caso de que exista violencia física, verbal o cultural. Y finalmente, conocer las causas principales que motivan a los hinchas a practicar un tipo de violencia u otro,  para conocer este punto podrá servir de ayuda pasar a los hinchas un cuestionario, y además como se ha dicho a través de vídeos y  la realización de una entrevista grupal.
La recolección de datos a través de la obtención de imágenes, vídeos, realización de cuestionarios y seguidamente la entrevista grupal, se llevará a cabo durante la temporada de fútbol 2010-2011, concretamente desde el comienzo de la investigación febrero del 2011 hasta final de temporada, aproximadamente finales de mayo del 2011. Una vez se tenga toda la información precisa para el estudio, se pasará analizar todo lo obtenido y ponerlo en relación con las principales aportaciones de los investigadores en la revisión bibliográfica.
También se utilizarán las noticias de prensa con el fin de obtener información actual sobre el tema, muchas de las noticias que se publican en prensa nos sirven para analizar y conocer tanto el tipo de violencia que predomina en el fútbol, el perfil de las personas que asisten y sobre todo, conocer qué influye para llevar a cabo la violencia. Por lo tanto, parte de nuestra información alcanzada será de noticas de prensa que se podrán visualizar en éste blog en el apartado de "noticias".
A continuación, se detallará la recogida de información especificando cada uno de los instrumentos y técnicas a utilizar, y qué se pretende obtener con cada uno de éstos.